Buscamos alcanzar los objetivos de nuestro Proyecto político pedagógico a partir de los siguientes líneas de acción:

 

Conciencia de la realidad social: Construir relatos enunciados desde un “nosotros” oprimido y latinoamericano que toma la palabra para hablarle y encontrarse con el mundo, y que al ser contado, se explique y se represente cuáles y cómo son los actores sociales con los que interactúa (coopera, lucha, etc.) en las intricadas redes de relaciones de poder de la dinámica social. Cómo son y condicionan los contextos culturales y geográficos en los que estas relaciones se establecen y desarrollan a lo largo de la historia. Y qué procesos históricos de transformación social condicionan (limitan y posibilitan) a estos sujetos sociales, al mismo tiempo que los protagonizan, los actúan y los posibilitan. Conocer el mundo desde el aporte de las teorías del conflicto.

​

Conciencia del mundo natural: Dar lugar a una concepción de la experiencia humana en el mundo y de nuestras interacciones vitales en él, basada en el respeto de la lógica a partir de la cuál siente, piensa, actúa y se desarrolla la vida en la tierra. Construir un relato de esa experiencia que se base en la convicción de que como especie humana formamos parte de la tierra que nos da la vida y que es el hogar que habitamos y compartimos con nuestros hermanos. Se trata de desarrollar una ecopedagogía.

​

Democracia participativa: Se trata de fomentar el protagonismo infantil a través de la generación de espacios de toma de decisiones como las asambleas para informarse, opinar, proponer, denunciar, resolver conflictos, promover la autoorganización, la toma de conciencia respecto del sentido de los limites institucionales, etc.

 

Cooperativismo: Aprender a organizarse colectivamente para concretar objetivos comunes e individuales a partir de una ética cooperativa y de vínculos solidarios.

Dar un lugar central en la experiencia subjetiva e intersubjetiva a la actividad productiva y creadora, entendida como constitutiva de la experiencia humana tanto por su importancia material como emocional.

 

Conocimiento personal: conocer la propia historia, su presente, sus potencialidades, ser autónomo -es decir, ponerse su propia norma (como individuo, como grupo, como organización)-.

 

Tecnología, artes y oficios. Favorecer la construcción de subjetividades no alienadas que potencien su capacidad creadora y su inteligencia a partir del trabajo y del encuentro con el fruto del trabajo, en un clima donde el placer, el deseo, la incertidumbre, la seguridad, la angustia, la superación de sensaciones de fracaso, y el ensayo y el error encuentren su lugar. Desarticular las teorías y prácticas internalizadas que conciben al error como hecho negativo, validándolo como parte fundamental del proceso creativo, como motor del desarrollo y la construcción del conocimiento. Iniciar un conocimiento rudimentario en técnicas para trabajar con diversos materiales y herramientas. Promover la unión mente-mano, mediadas por la herramienta. Principio fundamental de toda pedagogía socialista: no desvincular al homo faber del homo sapiens.

 

Lenguajes: Se trata de validar todas las formas de comunicación como medios para expresar y producir conocimientos, para transformar la realidad. , no solo el oral y escrito, sino también el lenguaje corporal, plástico, audiovisual, musical, etc. Todos estos lenguajes amplían las posibilidades de “decir” el mundo, hecho que define su naturaleza democrática. La posibilidad de abordar múltiples lenguajes posibilita además, otra relación con el mundo, alternativa y complementaria de la racionalidad científico-técnica imperante.

 

Trabajo comunitario: Desarrollar en los niños y niñas la conciencia de la necesidad de intervenir activamente en el mejoramiento de su barrio, desarrollando actitudes de empatía hacia las distintas necesidades de los vecinos, detectando problemáticas barriales y buscando resolverlas, constituyéndose paulatinamente en referentes, organizando y comunicando. Trabajar en el barrio, con las familias, la Escuela Popular es el barrio. Generar mayor participación de los vecinos en diferentes instancias.

 

Acompañamiento escolar: promover en los niños y niñas actitudes y estrategias para atravesar la escolaridad formal exitosamente. Establecer vínculos con las familias y las escuelas para desarrollar las mejores estrategias posibles que culminen en la promoción de los niños y niñas de su escolaridad.